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El tribunal de tres jueces votó por 2-1 el miércoles que los estados no pueden privar a la gente de su derecho fundamental a casarse simplemente porque eligieron una pareja del mismo sexo.
La idea de que permitir que los homosexuales se casen podría socavar de alguna manera el matrimonio tradicional, indicó el tribunal, es "completamente ilógica".
La decisión tomada por la Corte de Apelaciones del Circuito 10 respalda un veredicto anterior que derogó la prohibición al matrimonio homosexual en Utah. La sentencia se convierte en ley en los seis estados cubiertos por el décimo circuito: Colorado, Kansas, Nuevo México, Oklahoma, Utah y Wyoming. Sin embargo, el tribunal puso la sentencia en suspenso de forma inmediata, pendiente de apelación.
La oficina del fiscal general de Utah tenía previsto apelar, pero estaba estudiando si acudir directamente al Supremo estadounidense o pedir que todos los magistrados del décimo circuito revisen la decisión, indicó la portavoz Missy Larsen.
Tras conocerse el veredicto, las parejas mencionadas en la apelación se abrazaron, lloraron y se besaron en una rueda de prensa frente a las oficinas de su abogada en Salt Lake City.
"Esta decisión es una victoria absoluta para la justicia y la igualdad de todas las familias en Utah, en cualquier estado del décimo circuito y en cualquier estado de esta gran nación de los Estados Unidos", afirmó su abogada, Peggy Tomsic.
"Es un día increíble", dijo Chris Johnson, que se casó en diciembre con su pareja, David Tuma, cuando el matrimonio homosexual fue legal por un breve periodo de tiempo en Utah. "Nos conocimos hace 19 años. Somos ex miembros del ejército del Aire. Después de 19 años es maravilloso tener esta relación".
La decisión sigue a una impresionante lista de sentencias favorables en tribunales menores, después de que el Supremo rechazara el año pasado la ley federal de Defensa del Matrimonio.
El veredicto en Utah era especialmente significativo porque se trata del primer tribunal estadounidense que concluye que la decisión el año pasado del Supremo supone que los estados no pueden negar la opción de casarse. a los homosexuales.
Diariolibre.com
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