Al menos 18 personas murieron ayer y otras 42 resultaron heridas en dos ataques simultáneos, uno de ellos suicida y el otro con coche bomba, en el barrio de Al Sadr, en el este de Bagdad, informó a Efe una fuente policial.
El atentado más sangriento se produjo cuando un supuesto suicida detonó la carga explosiva que llevaba adosada al cuerpo en un funeral, lo que causó 15 muertos y 34 heridos.
De forma simultánea, un vehículo bomba que estaba aparcado cerca de un mercado popular explotó, lo que mató a tres personas e hirió a otras ocho.
La explosión también causó cuantiosos daños materiales en los locales y vehículos adyacentes, según la fuente.
Estos atentados se producen mientras que en el norte del país el grupo extremista Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL) está avanzando. El martes tomó la ciudad de Mosul, la segunda del país, y ayer Tikrit, capital de la provincia de Saladino, al norte de Bagdad.
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