El avión, que llegó al país desde Bruselas, tenía pautado aterrizar en Punta Cana, pero después de la amenaza debió hacerlo en el AILA, donde los organismos de seguridad ya estaban preparado para cualquier eventualidad.
De acuerdo a las autoridades, la llamada surgió desde el avión y una segunda supuestamente desde la ciudad de Santo Domingo, por lo cual realizan el rastreo para dar con el responsable de dar la alarma.
A las 9:00 de la noche, los pasajeros estaban en aduanas, mientras las autoridades se prestaban a revisar cada uno de los equipajes de los viajeros.
La Dirección Nacional de Investigaciones (DNI) había detectado durante la tarde una llamada telefónica a la torre de control donde se especificaba que había una amenaza de bomba a bordo del vuelo charter de la línea aérea Jetairfly, razón por la cual los organismos de seguridad se puso en alerta.
Unidades antibombas de las Fuerzas Armadas y de la Policía llegaron a la terminal, incluso en helicóptero, para dar respuestas a cualquier eventualidad. También, cuatro unidades del Cuerpo de Bomberos, que evacuó a los pasajeros del avión, la mayoría niños que vinieron al país de vacaciones.
Los viajeros fueron trasladados en autobuses a las rampas.
diariolibre.com
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