El cantante Justin Bieber sumó otro tatuaje y se convirtió en noticia, no por la parte de su cuerpo que eligió para que se lo dibujaran sino por el lugar en el que se concretó ya que se lo hizo en pleno vuelo.
Según publicó el sitio de noticias TMZ, todo ocurrió cinco días después del comentado arresto en Miami y mientras el joven se dirigía hacia Canadá en su avión privado, el cual fue adaptado como si fuera un estudio de tatuajes.
El diseño elegido por Bieber fue la palabra Forgive y el responsable de plasmarlo en uno de los costados de su panza fue el tatuador neoyorquino Bang Bang, quien también realizó trabajos en los cuerpos de Rihanna, Selena Gómez y Katy Perry, entre otras celebridades.
"Sin dudas ese fue el tatuaje más difícil que hice en mi vida", indicó el artista, asegurando además que la experiencia se trató de un verdadero desafío ya que no fue nada sencillo tatuar a 40.000 pies de altura y con turbulencia.
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