Lo que está pasando actualmente en Ucrania muestra quién dirigió el proceso desde el comienzo, aunque inicialmente EE.UU. prefería mantenerse en la sombra, reveló el presidente de Rusia, Vladímir Putin.
"Hasta cierto punto los intereses de EE.UU. y sus socios europeos coincidían, puesto que la Unión Europea a través de la Comisión Europea quería concertar el conocido acuerdo con Ucrania bajo unas condiciones desventajosas, según opino, para el país", explicó Putin después de una reunión que sostuvo con los mandatarios de Bielorrusia y Kazajistán.
El Gobierno anterior (legítimo) intentó luchar contra aquella imposición. Pero Occidente "optó por un guion diferente, el de la fuerza: una revuelta anticonstitucional, la apropiación del poder con la fuerza", añadió. Supuso también que en esos momentos los que estaban detrás de aquellos acontecimientos no tomaban en consideración las consecuencias a que llevaría todo eso.
"El propio Occidente armó un lío en Ucrania, y ahora se lanza a la búsqueda de culpables", sintetizó el mandatario ruso, "por eso están imponiendo sanciones a Rusia". El primer trámite de estas sanciones fue considerado por Moscú como “inamistoso”, admitió Putin. "Pero el segundo no sé qué es, es complicado de explicar de qué se trata", dijo. "No existe ningún nexo causal entre lo que está pasando ahora en Ucrania y Rusia".
"Si la UE y EE.UU. continúan con las sanciones, tendremos que reflexionar sobre su presencia en las ramas estratégicas de la economía rusa, en particular en el sector de la energía", advirtió el jefe de Estado. El Gobierno ruso ofreció algunas medidas de respuesta, pero de momento el presidente no las consideró necesarias.
Vladímir Putin condenó la detención de los observadores de la OSCE en el este de Ucrania. "No hay nada bueno en eso", constató. Pero la OSCE debía conversar sobre el despliegue de su misión con el sureste, algo que no reconocen las autoridades de Kiev, sugirió el presidente.
El líder ruso reiteró que en Ucrania no hay unidades especiales ni instructores militares rusos y Rusia "no tiene nada que ver" con los enfrentamientos bélicos que se registran en Donetsk y las provincias vecinas.
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