"Lo peor desde las sandalias con calcetines". Esa es la manera en la que, según algunos medios, la todopoderosa Anna Wintour, editora de la edición estadounidense de la revista Vogue, describió hace un tiempo a la estrella de la tele realidad Kim Kardashian.
Ahora parece que Wintour -fuente de inspiración del personaje de la malvada jefa de la película "El Diablo se viste de Prada"- ha cambiado de opinión y este mes de abril Vogue tiene en su portada a Kardashian y a su marido, el rapero Kanye West.
La aparición de la pareja en la que es considerada "la biblia" de la moda en Estados Unidos ha causado un gran revuelo.
Muchos lectores de Vogue han mostrado su descontento en las redes sociales, asegurando que Kardashian y West son la antítesis del buen gusto y no merecen aparecer en la publicación, llegando algunos a asegurar que piensan cancelar su suscripción a la revista.
La controversia -que dio lugar en Twitter a un llamado a boicotear a Vogue bajo el hashtag #BoycottVogue- hizo que Anne Wintour publicara un editorial en el que defiende su decisión de otorgar la portada de su revista a una de las parejas más mediáticas del momento.
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